Visión de Lisboa

Escribe Antonio Muñoz Molina sobre el Largo do Carmo y sus palabras me llevan a recordar los días que pasamos en Lisboa, hace sólo unos meses, y la tarde en que elegimos ese lugar para despedir nuestra estancia entre sus calles. Lisboa es una ciudad magnífica, cuyo encanto no abruma al visitante desde el mismo momento de su llegada, sino que se va desplegando a medida que éste la transita y se abre a ella, en un proceso de reconocimiento mutuo que puede durar unas horas o varios días, dependiendo del empeño que se ponga y de las ganas que uno tenga de dejarse mecer por el pulso tranquilo, nada airado ni violento, de la que algunos definen como la última capital europea, el más remoto confín del continente.

Sentados en una de las terrazas que pueblan la recoleta plaza abierta frente a la impresionante iglesia que echó abajo el terremoto de 1755, veíamos el transcurrir de la vida en aquella tarde de agosto con la apacibilidad de quien se entrega a la pereza como mejor remedio para dejar pasar las horas muertas. Una chica hacía malabarismos con fuego, un grupo de músicos daba un concierto improvisado a las puertas del viejo templo desvencijado, un par de mendigos andaban pidiendo limosna entre las mesas. A nuestras espaldas, sin que lo percibiésemos, continuaba el murmullo bullicioso que siempre hay en las proximidades de los Armazéns do Chiado, de la Rua Garrett, del Largo do Camôes. Teníamos tal sensación de plenitud que nos costó mucho irnos de allí, pero se aproximaba la hora de cenar y no quedó otro remedio que descender en el elevador de Santa Justa para acudir al restaurante de la Alfama desde el que vimos el espléndido atardecer que fue difuminando, poco a poco, el perfil de la ciudad hasta convertirla en un amasijo de luces que, ya en plena noche, dibujaba los contornos de nuestra felicidad. A lo lejos, se recortaba la silueta del puente del 25 de abril como una sutil promesa de horizontes cercanos y mejores. Como la revelación de que aquello no era una despedida, sino una invitación al regreso.

Anuncio publicitario
Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s