Una editorial

Apostar por la cultura es siempre un negocio delicado. Hacerlo en tiempos de crisis puede constituir, además, una temeridad. Y pese a eso, qué necesario es que de vez en cuando haya quien se líe la manta a la cabeza y nos haga ver, con su ejemplo, que no todo tiene por qué estar perdido. Que, como decía Bertolt Brecht, no debemos dejarnos amedrentar por las épocas oscuras, sino hacer acopio de ánimo para encararlas y vencerlas. La editorial Hoja de Lata nació hace sólo unos meses y se presentó en sociedad con una reedición de Arraianos, el magnífico libro de cuentos de Xosé Luís Méndez Ferrín, poco antes de sacar las Cartas de una pionera de Elinore Pruitt Stewart. Dos títulos importantes y valiosos que ejemplifican a la perfección esa bibliodiversidad que, por fortuna, se ha ido consolidando a lo largo de estos últimos años en nuestro ecosistema literario.

He estado leyendo estos días Los javaneses, una novela de Jean Malaquais cuya existencia desconocía y que merece mayor brillo del que le ha venido deparando la posteridad. Un relato divertidísimo, terrible y abrumador que desgrana las condiciones de vida de la clase obrera en un yacimiento de plomo y plata francés durante la primera mitad del pasado siglo. Una obra que, ahora que la clase proletaria apenas tiene ya conciencia de sí misma, resulta tan pertinente como aleccionadora, y que seguramente no habría caído en nuestras manos de no existir editoriales pequeñas, confortables, coherentes y sesudas que aún se obstinan, pese a todo lo que está cayendo, en cultivar el amor por la excelencia.

Anuncio publicitario
Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s